Hola, Andrés, me dejaste pensando, y cómo se acerca una a saber cuál es el problema difícil que quiere resolver. Yo, por ejemplo, quiero resolver problemas relacionados con nuestra relación con el trabajo. Y ahora que estoy en proceso de postularme a maestrías en recursos humanos y que debo presentar mi propuesta de investigación, me cuesta definir de tantos un problema relevante.
Hay un fascinante placer en lo difícil, en hacer lo difícil, porque lo fácil cualquiera lo enfrenta.
Abordar lo difícil (dentro de lo que cabe lo desgastante, lo que implica constancia más allá de toda esperanza), nos hace especiales por la certeza de saber que pocos aceptan ese tipo de desafíos y por ello, lo difícil nos hace valiosos.
Hola, Andrés, me dejaste pensando, y cómo se acerca una a saber cuál es el problema difícil que quiere resolver. Yo, por ejemplo, quiero resolver problemas relacionados con nuestra relación con el trabajo. Y ahora que estoy en proceso de postularme a maestrías en recursos humanos y que debo presentar mi propuesta de investigación, me cuesta definir de tantos un problema relevante.
Correcto!
Hay un fascinante placer en lo difícil, en hacer lo difícil, porque lo fácil cualquiera lo enfrenta.
Abordar lo difícil (dentro de lo que cabe lo desgastante, lo que implica constancia más allá de toda esperanza), nos hace especiales por la certeza de saber que pocos aceptan ese tipo de desafíos y por ello, lo difícil nos hace valiosos.